9/9/15

SHABBAT SHALOM

Shabbat shalom amados mios:
Yahweh AVINU nos siga guardando cada yom en la Obediencia, el ahavah, la rajamim y la Justicia.
Trae Yahweh a mi lev en este yom de Shabbat una reflexion que yo mismo quiero aplicar a mi jayim y a la misma vez compartirla con vosotros, esperando que siempre os pueda servir de ayuda en vuestro crecimiento y asi podais siempre dar TIFERET A YAHWEH que es quien nos alimenta, nos fortalece, nos Guia, nos protege y a veces nos mima y nos corrije.
Todos somos hijos y como hijos recibimos lo mejor de AVINU.
Una pregunta que Yahweh me hace hoy para Instruirme es esta y os la comparto:
¿Hasta dónde van tomadas de la mano la autoridad y la obediencia?
Mis amados ajim y ajotis, el propósito de Yahweh AVINU siempre ha sido que el hombre ejerza autoridad como puede ser observado en el mandato que él dio a la humanidad acerca de gobernar el mundo en Bereshit 1:28.  Como toda autoridad es delegada, la autoridad sólo puede ser usada por aquellos quienes mantienen una relación obediente con la fuente del Poder.
La Kitbé HaKodesh nos da un ejemplo de lo que es autoridad genuina ejercida en la perspectiva de AVINU (no nuestra) cuando describe a un militar pidiendo un milagro de Yahshua para uno de sus siervos.
Después que terminó todas sus palabras al pueblo que lo oía, entró en Capernaúm. Y el siervo de un centurión, a quien este quería mucho, estaba enfermo y a punto de morir. Cuando el centurión oyó hablar de Yahshua, le envió unos ancianos de los judíos, rogándole que viniera y sanara a su siervo. Ellos se acercaron a Yahshua y le rogaron con solicitud, diciéndole:–Es digno de que le concedas esto,  porque ama a nuestra nación y nos edificó una sinagoga.
Yahshua fue con ellos. Pero cuando ya no estaban lejos de la casa, el centurión envió a él unos amigos, diciéndole:–Adon, no te molestes, pues no soy digno de que entres bajo mi techo, por lo que ni aun me tuve por digno de ir a ti; pero di la palabra y mi siervo será sanado, pues también yo soy hombre puesto bajo autoridad, y tengo soldados bajo mis órdenes, y digo a este: “Ve”, y va; y al otro: “Ven”, y viene; y a mi siervo: “Haz esto”, y lo hace.
" Silas 7:1-8.

Amados en Yahshua, la verdadera autoridad es de origen espiritual.  Esa autoridad procede del ruaj de aquel que ejerce la autoridad e impacta sobre las personas sobre quién ejerce la autoridad.  Cuando aquellos que ejercen autoridad no están viviendo en OBEDIENCIA a su más alta autoridad,  ¿Qué ocurre? En ese caso ellos no tienen autoridad, sino Poder en su voluntad, Presión emocional o argumentos de fuerza.  Todo esto ya no viene del Ruaj de Yahweh, sino del alma y por ello sólo tocan el alma de  sus seguidores y por ellos, éstos pueden responder con resentimientos o amargura y se abrirán al conflicto.
Si debemos de servir a Yahweh, la sujeción a la autoridad es una necesidad absoluta.
La obediencia transciende a lo que hacemos.  Dawid por ello detuvo su mano de tocar al “ungido de Yahweh” 

Amados corderos del Mashiaj, ser lleno de Yahshua es ser lleno de obediencia.
Asi nos lo expresa una y otra vez el Ruaj de Avinu en la Escritura.
"Haya en ustedes esta manera de pensar que hubo también en el Mashíaj Yahshúa: Existiendo en forma divina (su naturaleza celestial), él no consideró la usurpación de ser igual a Elohim (en esa naturaleza elestial); sino que se despojó a sí mismo (de su naturaleza celestial), tomando forma de siervo (hombre), haciéndose semejante a los hombres; y hallándose en condición de hombre, se humilló a sí mismo haciéndose obediente hasta la muerte, ¡y muerte en el madero! Por lo cual también Yahweh Elohe lo exaltó hasta lo sumo (le dio poder) y le otorgó el nombre que está sobre todo nombre (Yahshua, nombre que no posee ningun otro hombre en la tierra); para que en el nombre de Yahshúa se doble toda rodilla de los que están en los shemayim, en la tierra y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que Yahshúa el Mashíaj es soberano, para Tiferet de Yahweh el Padre." Filipiyim 2:5-11
Amados luchemos cada yom por alcanzar esta promesa PARA LA TIFERET DE YAHWEH EL ABBA.--
Yhemaelh Zeev

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